jueves, 4 de noviembre de 2010

HOMENAJE A NESTOR

Señor Presidente:

Hoy este H.C.D. realiza un modesto homenaje a la memoria de Néstor Kirchner, el principal protagonista en la construcción de esta nueva Argentina.

Cabe destacar que el mayor homenaje lo hizo el pueblo argentino que masivamente se movilizó, lo lloró y expresó su apoyo a Cristina.

Considerar que el homenaje a la dirigencia política de todos los partidos deben hacer sería el aprendizaje de que la política sirve para cambiar, que el país se construye con políticas y que si no lo organizamos desde la política se organiza desde las corporaciones para sus propios intereses.

Y que el mejor homenaje desde el peronismo y otras expresiones políticas que apoyan este modelo es militar activamente para defender y profundizar el rumbo elegido, que el pueblo avala y plebiscito en medio del dolor, con el grito de “Fuerza Cristina”.

Hace dos semanas aproximadamente, en la última sesión ordinaria de este Concejo, hablaba del mes de octubre y su empeño por ser parte de la historia.

Octubre lleno de acontecimientos: buenos y malos, pero insoslayables.

En octubre nacio Perón y tambien murio el Che.

Llegaron a tierras americanas los españoles y pero fue el último día de llibertad de los pueblos originarios de América,

Encerraron a Perón y el 17 el pueblo lo rescató,

Murió Néstor Kichner, pero la argentina descubrió asombrada, que existe un proyecto colectivo sostenido por la militancia que revivió en estas tierras.

Y así, como pensaba en octubre, en los octubres, pensaba en que decir en este homenaje que no haya sido repetido cientos de veces en los distintos medios y por distintas voces.

¿Hablar de su compromiso con los derechos humanos?

Ese compromiso que no se reduce (como si fuera poco) al Juzgamiento de los genocidas en un marco de derecho que les otorga las garantías que negaron a los miles de miles que asesinaron, torturaron, violaron y mataron, si no que vemos reflejado en cada uno de los planes y programas destinados a garantizar salud, educación, vivienda, capacitación y trabajo para todos y todas.

Pero no, no voy a hablar de eso, rios de tintas se usaron en escribir con mejores palabras lo que esto significó y significa para la Argentina.

De la recuperación económica?,

Del aumento del producto bruto interno?,

De la enorme rentabilidad para el sector productor en la Argentina?.

De haber recuperado la soberanía y la autonomía para decidir como país sin tener que seguir cumpliendo el lamentable papel genuflexo ante el FMI porque se pagó la deuda externa contraída en otros gobiernos?

Los economistas, propios y ajenos están escribiendo sobre esto.

El ingreso universal por hijo?

Las jubilaciones para casi dos millones de ancianos y ancianas que estaban condenados a vivir y morir en la indignidad?

El aumento del presupuesto educativo, la construcción de escuelas, la reducción de la brecha tecnológica, los salarios docentes que por fin son decentes?. La promoción de derechos de las minorías.

No, la enumeración puede ser demasiado larga.

Ni siquiera voy a hablar de lo que hoy se muestra como su mayor logro, el habernos devuelto la esperanza, el haber devuelto a la política su rol y su dignidad de herramienta para la transformación, que se tradujo en los miles e jóvenes y no tan jóvenes en las plazas del país, reivindicando su derecho a participar y ocupar su lugar en el espacio publico, en la política y en la historia.

Hoy quiero rendir mi homenaje al compañero Néstor Kichner, al compañero que durante años persiguió un sueño, el que aceptó el desafío de ser Presidente en un momento en el que ser político era mala palabra (se acuerdan del que se vayan todos?; ¿se acuerdan de los políticos insultados en las calles y corridos de los bares?) y en el que un escaso 22% confió en él.

Es verdad, la mayoría no lo voto.

El asumió la presidencia de una Argentina desesperada y sin ilusiones y desde el momento mismo de al asunción le puso una sonrisa al desafío.

Y con esa sonrisa que acompañaba su convicción militante, fue devolviendo al país la esperanza. Esa esperaza en la patria grande, en la patria justa, en la patria soberana.

Y con esa sonrisa que dejó gravada en los rostros de las madres, de los hijos, de los jóvenes, de los viejos, de los niños, de lo adolescentes, de los trabajadores, de los científicos que volvieron a creer en el país porque este gobierno los apoya y no los manda a lavar los platos, de los maestros, de los creadores y los artistas y de cada uno y cada una de las personas que habitamos este bendito país, le rindo hoy mi homenaje porque hoy y por todo esto podemos decir : La patria existe y el futuro es posible .

Y decir con Bertolt Brecht:

Hay hombres que luchan un día y son buenos.

Hay otros que luchan un año y son mejores.

Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos.

Pero hay los que luchan toda la vida,

Esos son los imprescindibles.

Néstor era un imprescindible.

Gracias compañero Néstor! Hasta la victoria!

Muchas gracias.


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